Visita en familia los Mercados de Navidad de Alsacia – Nuestras 11 ideas

1. Sélestat, Tierra del Sa-pain (por Clémence)

Sélestat es LA ciudad del abeto. Aquí es donde, durante el 1 a primera mención del abeto como adorno navideño data de 1521. Hoy en día, esto convierte a la ciudad en la capital del país navideño del mismo nombre.

Taller en la Maison du Pain d’Alsace

Lo que me motivó inmediatamente a ir allí fue eltaller de manala (mannele, ya que estamos en el Bajo Rin) de la Maison du Pain d’Alsace. En 1 hora, mi hija y yo hicimos nuestros hombrecitos y mujercitas personalizados. La masa ya estaba lista, pero dimos forma a nuestros manala (¡menuda técnica!) y Luce también los metió en el horno. La Maison du Pain d’Alsace organiza talleres regularmente, según la época del año.

Pero la Navidad en Sélestat no es sólo la Maison du Pain d’Alsace. Forma parte de una ruta de 13 paradas por la ciudad, con exposiciones, un pueblo navideño, una pista de patinaje sobre hielo y diversos actos para amenizar el paseo.

Biblioteca, iglesia y bóveda

El 1er paso es obviamente el básico: sacar a la luz el famoso registro de 1521 en la flamante Biblioteca Humanista.

A Luce y a mí también nos gustaron mucho las exposiciones sobre los adornosde cristal de Meisenthal y lahistoria de la decoración de los árboles de Navidad en la iglesia de Saint-Georges. Por cierto, ¿has oído hablar de los adornos de cristal de Meisenthal? Cuando un invierno seco azotó la región, fue imposible encontrar manzanas para decorar los árboles de Navidad, como dictaba la tradición. A un soplador de vidrio se le ocurrió sustituirlas por adornos de cristal. Hoy, el CIAV (Centre International d’Art Verrier) de Meisenthal perpetúa este arte.

Luego, cuando llegamos frente a la bodega Saint-Barbe, nos encontramos con un grupo de duendes chiflados llamados Les Gnomides.

Profesor Sapinus

Empujamos la puerta y llegamos a La Sapinière aux Mille Secrets, la guarida del Profesor Sapinus. ¿Qué profesor? ¡El mayor conocedor de abetos de Sélestat, Alsacia y la Mooonndde! En su stuwa (salón alsaciano), le cuenta a Luce la leyenda del árbol de Navidad. Incluso yo, que sé mucho sobre los abetos de Alsacia, ¡aprendí algunas cosas! No voy a contarte nada aquí, no, no. Te daré la oportunidad de conocer a este increíble profesor, por si quieres saber más.

Mercado de creadores

Tras un pequeño mercado de artistas en la 1ª planta del edificio, llegamos a la gran sala de la 2ª planta.En la segunda planta, está el concurso de árboles. Genial, podemos votar por nuestros favoritos, ¡para gran alegría de mi niña! Son todos tan diferentes que no fue fácil decidir entre ellos… Estamos deseando que acabe el concurso para saber quién será el afortunado ganador.

En resumen, fue una gran excursión familiar, incluso en un día lluvioso. Es cierto que hay que caminar entre los distintos escenarios, pero casi todos están resguardados.

2. Navidad de ensueño en Obernai (por Clémence)

Obernai es, junto con Sélestat, la otra etapa ineludible del País de los Árboles de Navidad. El mercado navideño de Obernai es a escala humana, con 5 plazas en las que hay chalets de diseñadores, artesanos (textil, madera, vidrio soplado, etc.) y delicias (productos locales, galletas, chocolates, licores, crepes, quesos, etc.).

El lugar de los niños

Cuando llegues, incluso en un día lluvioso, en cuanto caiga la noche, ¡el efecto sorpresa está garantizado ! Todo está iluminado y bellamente decorado, desde la plaza Neher, al pie de las murallas, hasta la plaza de l’Etoile, la“plaza de los niños”.

Aquí es donde decidimos parar un poco más, para ver el carrusel Adam y el Petit Train. Por el camino, nos encontramos con un personaje muy conocido por los alsacianos y los europeos del norte en general: ¡Saint-Nicolas!

Aperitivo gourmet

Para merendar, seguimos el consejo de la Oficina de Turismo y nos detuvimos en el chalet “Nature et créations”, donde Anny ofrecía chocolate con leche y blanco en diversas formas, incluso caliente, así como gofres. Nos encantaron los gofres con especias navideñas. ¡Qué ricos!

Para mí, este mercado navideño es una gran alternativa a los mercados más grandes. La magia está ahí, y los muchos visitantes que pasean por las calles de Obernai ¡lo han entendido de verdad!

Nota de Laurène: Participé en la Tournée des Bredele, un paseo de cuentos y canciones por las calles de Obernai que se puede hacer con niños. Cantas, comes bredele y paseas por las calles de Obernai… Un buen programa, ¿verdad?

3. Barr, ¡un paraíso para los niños! (por Clémence)

Barr es un pueblecito encantador de la Ruta del Vino de Alsacia, entre Sélestat y Obernai. Lo descubrimos con nuestra familia al final de un día lluvioso. La decoración aquí es sencilla pero muy bonita, con guirnaldas de luces que recorren calles enteras.

Tres mercados navideños

El 1er mercado navideño (¡hay 3!) es en el ayuntamiento. Delante del ayuntamiento, los niños y mi querida se divierten con los juegos de madera que hay.

Más abajo, encontrarás “Le 66 Grand’Rue”, rebautizado para la ocasión como“Village des enfants“. Aquí es donde tienen lugar los talleres infantiles, pero también se ofrecen otros juegos de madera. Por desgracia, llegamos demasiado tarde para participar, pero los niños y mi querida pudieron disfrutar de los juegos de madera. ¡Fue una gran idea hacerlo bajo techo! Si llueve o hace frío, puedes recargar las pilas sin aburrirte. Al fondo de la sala, un bonito pasadizo decorado nos llevó a una gran sala que me pareció encantadora con sus vigas de madera y su aspecto de hangar: era el 2º mercado de Navidad con artesanía, productos locales, un puesto solidario…

Al otro lado del edificio “66 Grand’Rue”, en un patio, nos espera un último bloque de chalets. También hay un pequeño tiovivo con algunos puestos para tentar a los amantes de la comida.

Espectáculos de tarde

La experiencia fue realmente demasiado corta para poder contarte más sobre este mercado navideño, pero debes saber que también hay espectáculos durante toda la tarde (le Colporteur d’histoires, la rond du veilleur de nuit…), cuentacuentos en el Musée de la Folie Marco, talleres participativos… Sí, lo habrás entendido, ¡nos sentimos un poco frustrados por no haber pasado más tiempo allí!

4. Soultz-sous-Forêts y su cálida animación (por Thibaut)

La temporada de mercados navideños está en pleno apogeo en Alsacia. Naturalmente, todas las miradas están puestas en Estrasburgo, Colmar y Kaysersberg, pero también hay una serie de mercados más pequeños que se están haciendo un nombre por sí mismos. Te llevaré a Soultz-sous-Forêts, en el norte de Alsacia, una pequeña pepita escondida tras el bosque de Haguenau. Puedes combinar esta visita con otra al mercado navideño de Haguenau: las dos ciudades están a sólo 20 minutos de distancia.

Soultz-sous-forêts, un íntimo mercado familiar de Navidad

En pleno corazón de la reserva natural de Outre Forêt, el mercado navideño de Soultz-sous-Forêts me sorprendió nada más llegar. Aquí se respira una especie de serenidad, lejos del frenesí de otros mercados, y un ambiente bonachón. Este pueblo de 3.500 habitantes cobra vida todos los sábados y domingos de diciembre en torno a su centro cultural de La Saline.

La plaza del General de Gaulle alberga una pequeña pista de hielo donde los niños pueden probar el placer de deslizarse, tanto sobre patines como sobre sus culos. Alrededor de la plaza hay varios chalets de madera que venden dulces navideños tradicionales, como bredele, vino caliente y crêpes. También hay adornos navideños y juguetes de madera fabricados en Alsacia.

Además de la pista de patinaje sobre hielo, los niños disfrutarán especialmente de los espectáculos que se ofrecen en la plaza:

• Una oportunidad de conocer a personajes emblemáticos de la Navidad, como el Wiehnachtsmann vestido de verde, que está encantado de que los niños le fotografíen y le hablen bajo el quiosco de música.
• El Sr. François, cartero personal de Papá Noel, recorrerá el mercado en su scooter de tres ruedas para contar historias divertidas y fascinantes. Como buen cartero, se asegurará de recordar a los rezagados que envíen su carta a Papá Noel.

Cálido entretenimiento en La Saline

El otro gran atractivo del mercado navideño de Soultz-sous-Forêts es su bonito centro cultural, La Saline, donde podrás disfrutar de actividades (¡y aseos!) al calor de la ciudad:

• Espectáculos en alsaciano y dibujos animados clásicos en el auditorio (entrada gratuita)
• Taller de decoración de bredeles para niños con un pastelero
• Un Café Bistro al estilo del siglo XIX, tan agradable como solidario. El mobiliario es un préstamo de Emmaüs Haguenau. Si te gusta el sillón en el que te sientas a tomar el café, puedes comprarlo en la asociación.

Como habrás deducido, me gustó mucho este pequeño mercado navideño a escala humana, donde la gente no se pisa, donde los niños pueden divertirse con las muchas actividades que se ofrecen y donde los actores locales ocupan un lugar destacado.

5. Ribeauvillé, el mercado medieval de Navidad (por Laurène)

Si buscas un mercado original con muchas diversiones para los niños, el Mercado de Navidad de Ribeauvillé es una gran idea.

Se trata de un mercado navideño de temática medieval, organizado por las asociaciones del pueblo, que participan durante dos fines de semana de diciembre. Todo el mundo va disfrazado, las animaciones son realmente medievales, con antiguos juegos de madera, y el ambiente es muy agradable.

Con niños, no te pierdas la parte del mercado conocida como el“Reino de los Elfos“, que está enteramente dedicada a ellos. ¿Por qué no dar un paseo en el regazo de Papá Noel y deslizarse por un tobogán de madera antes de jugar a algunos juegos medievales con la familia?

6. Navidad en familia en Mulhouse (por Clémence)

No muy lejos de aquí, tenemos la suerte de contar con el mercado navideño de Mulhouse. ¿Suerte? Sí, porque con niños, ¡es un verdadero placer!

El tejido de la Navidad

Ya es una fiesta para los ojos de toda la familia, porque la decoración es mágica. Cambia cada año: las luces se adaptan a laexclusiva tela que decora el antiguo ayuntamiento renacentista, pero también los chalets del mercado y los escaparates de las tiendas. Mulhouse es una ciudad creativa, por lo que los artistas también participan.

La noria y el carrusel

Fuera, alrededor del mercado navideño, encontrarás un carrusel de época y, sobre todo… ¡una noria! Cuidado con los que tengan un poco de frío, tanto en sentido literal como figurado (mide 38 metros). Pero a los niños les encanta: es una visita obligada todos los años. Y la vista del mercado navideño es única. Dos consejos: cúbrete cuando haga mucho frío y no vayas antes del anochecer.

Talleres en el chalet de Navidad

Al estar allí un miércoles, llevé a los niños al Chalet de Navidad. En el calor de un chalet con vistas al ayuntamiento y la fuente, bellamente decorados, participamos en dos talleres. Con motivo del día de Santa Lucía, los niños crearon sus propios portavelas en forma de ángel. Un segundo taller de colgar telas fue dirigido por diseñadores textiles. Es fácil mantenerse ocupado durante tres cuartos de hora. Los talleres se celebran al menos todos los miércoles y sábados durante el mercado navideño, con un tema diferente cada vez. En el chalet de Navidad, también puedes disfrutar de cuentacuentos, conocer a Papá Noel y sus duendes… En resumen, es EL lugar para estar con niños.

Tienda de telas

También puedes pasarte por la Boutique aux Etoffes. Además de estupendas ideas de regalos locales para Navidad, también puedes encontrar “La Minute Textile”, un taller donde puedes hacer tu propia postal: cada año, un nuevo ilustrador la diseña, a menudo en clave de humor. Recortas un trozo de tela navideña y lo incorporas a la tarjeta para hacer un diseño único. Las ventajas: es superrápido y es un bonito recuerdo de una visita a Mulhouse.

7. Estrasburgo, ¡un gran mercado con muchas diversiones! (por Laurène)

El Mercado de Navidad de Estrasburgo es sin duda el mercado navideño más conocido de Alsacia. Lo que es menos conocido es que se organiza un gran número de actividades y eventos para familias. Es la forma perfecta de pasar un rato agradable con los niños, mientras aprenden cosas nuevas de forma divertida.

También es una buena idea permitirles que se tomen un descanso de la exploración del mercado: como adulto, es fácil deambular por los pasillos del Mercado de Navidad durante todo un día, pero no se puede decir lo mismo de los niños, que a menudo se cansan del paseo más rápidamente… Intercala una actividad a lo largo del día y ¡todos estarán contentos! 🙂

Es imposible enumerar todas las actividades y eventos que se ofrecen para las familias, ya que hay muchísimos, pero debes saber que puedes, por ejemplo :

• visita un pueblo navideño acogedor para los niños y aprovecha las numerosas actividades que se ofrecen
• participa en una búsqueda del tesoro tras las huellas de Papá Noel con Il était une fois la ville (Érase una vez la ciudad)
• aprende a hacer bredele y mannele en el Marché des Délices d’Alsace
• participar en una amplia gama de talleres en el Marché Off de Estrasburgo (iniciación a la cerámica, creación de objetos con una impresora 3D, talleres de escritura, etc.)
• participa en visitas guiadas de la ciudad adaptadas a los niños
• escucha un cuento de Navidad mientras das un paseo en barco con Batorama
• patinar sobre hielo al pie del gran abeto de la plaza Kléber

En resumen, ¡no deberías aburrirte! 😉

8. El bosque encantado de Altkirch (por Clémence)

En Altkirch, en la región francesa de Sundgau, la Navidad es el momento perfecto para descubrir un bosque de cuentos y leyendas. El Bosque Encantado de Altkirch es diferente de los tradicionales mercados navideños alsacianos los tradicionales mercados navideños alsacianos Experiencia navideña. También hay un pueblo navideño, una pista de patinaje sobre hielo y visitas guiadas con cuentacuentos.

Pero, ¿de dónde surgió exactamente la idea de presentar cuentos y leyendas? En el Sundgau, las leyendas son una parte importante de la tradición local. Y sí, en aquella época, la noche y el frío omnipresentes dieron lugar a muchas leyendas, algunas de ellas bastante oscuras.

Cuentos y leyendas del Sundgau…

Optamos por descubrir los distintos cuentos participando en un recorrido narrativo. La puesta en escena por sí sola merece la pena: no le falta humor. Pero es aún mejor con un narrador apasionado que da vida a los cuentos y leyendas. Incluso los niños estaban especialmente atentos. ¡El tema del año en la clase de mi pequeño loulou es la narración de cuentos! Escuchó atentamente al cuentacuentos, sobre todo durante la historia de Hansel y Gretel.

La visita guiada para contar cuentos duró una hora y media. Repasamos una docena de cuentos, de la región de Sundgau o más conocidos, entre ellos :

• La joven y la fuente
• Hansel y Gretel
• Les Fouletots (¡con un juego para ganar un viaje!)
• En la granja con gansos y conejos
• El Ogro de Bombach
• Los 2 abetos de la iglesia de Sainte Aurélie

Vinimos al final de la temporada, así que el pueblo de los artesanos ya estaba cerrado. También hay exposiciones todos los años en el Museo Sundgauvien y en el CRAC (Centro Regional de Arte Contemporáneo).

Y ya que estás por ahí en invierno, echa un vistazo a los frescos de arte callejero de Altkirch: ¡la ciudad está llena de ellos!

La Cueva de las Luciérnagas

Un poco más adelante en el pueblo, nos detuvimos en la sorprendente“Grotte aux Lucioles“, un lugar creado por una pareja particular. Aquí hay varias zonas diferentes, empezando por la gruta, toda iluminada con hadas, duendes y trolls… Luego llegas a una ventana que protege… ¡una enorme maqueta de tren! A los niños les encanta. Y mientras esperan, los padres pueden observar cada detalle y personaje de la escena. ¡Los maquetistas suelen ser grandes bromistas! ¡Luego pasamos a la guarida de El Señor de los Anillos! La pareja colecciona personajes de tamaño natural, desde un orco hasta Frodo Saquet, sin olvidar a Gandalf y Gimli. Una última sala está llena de muñecas de porcelana antiguas y elfos autómatas. ¿Elfos de Papá Noel? El misterio sigue…

La visita dura 30 minutos, pero es un pequeño desvío poco habitual antes de volver a salir de Altkirch.

9. Navidad en el Ecomuseo de Alsacia (por Laurène)

Me encanta el Ecomuseo de Alsacia en general, y te recomiendo especialmente que lleves allí a toda la familia en Navidad si quieres sumergirte en la cultura y las tradiciones navideñas alsacianas… ¡Se organizan montones de talleres y actos!

10. Navidad en el jardín del Parque de Wesserling (por Clémence)

El Parque de Wesserling puede visitarse durante todo el año, pero hay algunas actividades especialmente divertidas para los niños durante el periodo navideño. Lee el artículo completo de Clémence sobre el Parque de Wesserling para saber más.

11. La caza del tesoro en Navidad (por Clémence)

Todos los años, en Navidad, las Oficinas de Turismo de Alsacia proponen una treintena de búsquedas del tesoro por toda la región. ¡Una forma estupenda de (re)descubrir Alsacia en familia!

Concepto de búsqueda del tesoro

¿El concepto? A lo largo del paseo que elijas, te divertirás respondiendo acertijos y encontrando una frase o palabra tesoro, normalmente relacionada con el pueblo/ciudad en el que te encuentres. Esto te permitirá volver a la Oficina de Turismo para recoger una pequeña recompensa. Por ejemplo, nosotros recibimos una preciosa lámpara colgante de madera o cerámica para nuestro árbol, fabricada localmente.

Las cacerías duran entre 1h y 1h30, lo que es perfecto incluso para los niños más pequeños, y te ofrecen una forma totalmente nueva de descubrir la Navidad en Alsacia y las ciudades y pueblos donde tienen lugar. A mí misma me sorprendieron algunos pueblos que ya conocía.

Recuperar cartillas

En las oficinas de turismo participantes encontrarás un folleto con todas las búsquedas del tesoro navideñas. Cada año, algunas de las cazas del tesoro se renuevan o cambian los lugares participantes. Y eso es estupendo, porque significa que cada año puedes descubrir nuevos destinos y nuevas rutas.

Y aquí tienes una bonificación: si completas 3 búsquedas del tesoro, podrás participar en un concurso para ganar un fin de semana en familia. No olvides sellar tu formulario de inscripción en las oficinas de turismo para participar.

En resumen, es la forma perfecta de completar un mercadillo navideño familiar u otra actividad navideña. En nuestra casa, ¡a los niños les encanta!